Las razas de «Ternera Asturiana de los Valles» y «Ternera Asturiana de la Montaña» se producen bajo la certificación de la IGP «Ternera Asturiana».
Se trata de unas razas excelentes para la producción de carne, en las que se certifica tanto el origen genético, como la crianza y cuidados que han de tener los animales, con una alta exigencia en el bienestar de los mismos.
El Reglamento de la IGP Ternera Asturiana exige un manejo de los animales según los modos tradicionales de aprovechamiento de pastos. Siguiendo una alimentación muy restringida en cuanto a las materias primas, los animales deben ser manejados siguiendo las normas de bienestar animal, exigiéndose un especial cuidado en el tratamiento de los mismos desde el nacimiento.
Criados y alimentados en los verdes prados del Principado de Asturias, «Ternera Asturiana» es sinónimo de la mejor carne.
La IGP Ternera Asturiana sólo permite el uso de alimentos naturales para sus terrenos, teniendo para ello una Lista de Productos Conformes, que excluye el uso de cualquier producto que incremente el peso del animal. Los componentes de esta lista son: cereales, leguminosas, tortas de soja y girasol, salvado y tercerilla, gluten feed, melazas y correctores vitamínico-minerales. La grasa debe ser, en caso de uso, de palma.
Los animales deben estar con la madre al menos los cinco primeros meses de vida, amamantando.
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